El gigante estadounidense de chips Wolfspeed planea eliminar 1.000 puestos de trabajo y cerrar una fábrica

El fabricante estadounidense de chips Wolfspeed anunció que debido a la lenta demanda en el mercado automotriz, la compañía cerrará su fábrica de carburo de silicio de 150 mm en Durham, Carolina del Norte, y despedirá al 20% de sus empleados, o alrededor de 1.000 personas. La medida surge en respuesta al impacto de la desaceleración de las ventas de vehículos eléctricos en la demanda de chips de carburo de silicio. Wolfspeed espera que los ingresos del segundo trimestre fiscal estén entre 160 y 200 millones de dólares, por debajo de las expectativas de los analistas de 214,6 millones de dólares.