Los reguladores han frenado el fenómeno de los "préstamos para coches más baratos" en el mercado automovilístico chino.

El fenómeno de que "comprar un coche con un préstamo es más barato que pagarlo todo", que antes era popular en el mercado automovilístico chino, ha sido frenado recientemente por las autoridades reguladoras. Este modelo, conocido como "alto interés y alta rentabilidad", aunque parece beneficioso para consumidores, concesionarios y bancos, es en realidad una forma de aprovechar las lagunas de la nueva política energética del país. Con la intervención de los reguladores, este modelo se ha frenado, lo que ha impulsado a la industria a reflexionar sobre su futuro desarrollo.